Allí se presentaron los lineamientos sanitarios para el año que se inicia y las metas a cumplir en el marco del Proyecto FESP II (Funciones Esenciales de Salud Pública).
El encuentro, concretado en la Sala de Situación, fue encabezado por Daniel Manoukian, a cargo de la Secretaría de Políticas Públicas de Salud, quien destacó que “la idea de esta gestión es consolidar el Plan de Salud, que es la forma de tener claramente la direccionalidad de las acciones y así dar la mejor respuesta posible para mejorar la salud de los rionegrinos.”
Detalló que el mencionado Plan “se divide en tres grandes campos, que son los modelos de Gestión, Financiamiento, y Atención.”
El Modelo de Gestión, “incluye la macro política sanitaria, la definición de prioridades, la definición de líneas de trabajo y la articulación de recursos”, precisó. A continuación, se refirió al Modelo de Financiamiento como “el componente que actúa como articulador entre la macro política y la micro gestión”. El Modelo de Atención, dijo, “es la relación entre los trabajadores de Salud y la población, la atención de las personas en los distintos ámbitos.”
“Este Plan tiene una mirada enfática en aquellos problemas que, siguiendo la secuencia del ciclo vital de la familia, en cada momento de la vida de las personas, producen gran impacto en la carga de enfermedad”, afirmó Manoukian.
En las acciones priorizadas incluyó a “las estrategias para disminuir la mortalidad infantil, también el programa de inmunizaciones, la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles y la morbimortalidad por lesiones de causa externa, primera causa en la Argentina de años potencialmente perdidos por la población, como así también el abordaje de las adicciones.”
Luego de destacar que para la Gestión ministerial “los programas nacionales, provinciales y locales, deben estar al servicio de ese Plan de Salud, funcionales a los objetivos centrales que estamos planteando”, resaltó la trascendencia que para esa política sanitaria tiene el FESP.
El proyecto FESP I Y II está orientados a fortalecer las capacidades institucionales de las autoridades sanitarias, nacionales y provinciales, para ejercer las responsabilidades del Estado respecto a la promoción y protección de la salud de la población mediante la medición y el desarrollo de las funciones esenciales de salud pública que son de su competencia.
“El de Funciones Esenciales de Salud Pública es un Programa transversal. Si cumplimos con las metas del Programa y las actividades previstas, estamos dando cuenta de la función indelegable que tiene el Ministerio de Salud de la Provincia como Ente rector del sistema sanitario”, puntualizó Manoukian.
Como objetivos, el FESP plantea mejorar el rol de rectoría del sistema de salud pública nacional y provincial a través del fortalecimiento de las Funciones Esenciales de Salud Pública, y aumentar la cobertura, calidad, y eficacia de un grupo de programas priorizados de salud pública.
Allí se encuentran los programas de VIH/SIDA, Sangre segura, Tuberculosis, Enfermedades no Transmisibles, Promoción de la Salud y Control de ENT, Incluir Salud, Enfermedades Inmunoprevenibles: ProNaCEI, Salud Investiga, INCUCAI, Salvaguarda Ambiental e Indígena, Municipios y Comunidades Saludables, Tuberculosis, Enfermedades Vectoriales: Dengue/Chagas, Emergencias Sanitarias, Regulación sanitaria y calidad en servicios de salud, Capital Humano y salud ocupacional.