Se recordó que las diarreas son episodios frecuentes y que, en la mayoría de los casos, se resuelven rápidamente y con cuidados en el hogar; pero son especialmente peligrosas para los niños pequeños, los bebés y los ancianos, más aún en esta época del año donde crece el riesgo de deshidratación.
La diarrea se caracteriza por el aumento del número de deposiciones y el cambio de sus características, que pasan a ser blandas o líquidas. Como la mayoría, son de origen viral y se acompañan con fiebres y vómitos. También pueden ser ocasionadas por otros microorganismos, por lo que es muy importante la higiene personal, de los alimentos, el agua y el medio que nos rodea.
Recomendaciones para prevenir diarreas
• Lavarse las manos con agua y jabón antes de cocinar y de preparar las comidas, durante la preparación las veces que sea necesario, después de cambiar pañales o ir al baño.
• Usar agua potable segura para beber, lavar y preparar los alimentos (ante la duda sobre la calidad del agua hervirla de 3 a 5 minutos o bien agregar 2 gotas de lavandina por litro).
• Consumir productos sanos y frescos. Separar siempre los alimentos crudos de los cocidos o listos para servir. No dejar alimentos cocidos a temperatura ambiente por más de 2 horas. No guardar las comidas preparadas por mucho tiempo, ni siquiera en la heladera. No descongelar los alimentos a temperatura ambiente.
• Mantener los baños limpios; combatir moscas e insectos y conservar la basura hasta su recolección, lejos de la cocina y tapada.
• No bañarse o nadar en áreas que no estén explícitamente autorizadas por las autoridades sanitarias.
Para evitar la deshidratación se recomienda a las madres dar de beber a los niños agua fresca y segura durante todo el día y, en el caso de los lactantes, darles el pecho con mayor frecuencia.
En tanto, los adultos mayores deben beber agua aún cuando no tengan sensación de sed ya que en ocasiones de extremo calor los mecanismos orgánicos que advierten la sensación de sed pierden sensibilidad.
Finalmente, es importante destacar que si se presentan síntomas como diarrea, vómitos y/o dolor abdominal evite manipular y/o preparar alimentos y consulte inmediatamente a un profesional de la Salud. No se automedique ni administre a los niños ningún medicamento.